Una vez más la empresa CASINO de Buenos Aires muestra la impunidad con que se mueve, violando abiertamente la normativa laboral ante la pasividad cómplice de las autoridades.

Primero, permitiendo el ingreso de personas ajenas al establecimiento con el solo fin de agredir a los trabajadores reunidos en asamblea, en legítimo ejercicio de sus derechos sindicales. Luego, pretendiendo cínicamente trasladar la culpa del conflicto hacia los propios trabajadores agredidos, despidiendo a setenta compañeros.

A todo esto se agrega la inoperancia del Ministerio de Trabajo, el que una vez más revela su parcialidad, permitiendo a la empresa violar normas, agredir trabajadores, y castigar con despidos masivos.

Desde el TEL nos solidarizamos con los trabajadores del Casino en sus legítimos reclamos, demandando la inmediata reincorporación de todos los despedidos y la plena vigencia de los principios de protección al trabajo y de libertad sindical, sustentados en expresas garantías constitucionales y en normas de derecho internacional que hoy constituyen el cuerpo de derechos humanos y sociales al que deben someterse la empleadora y la misma autoridad ministerial.